martes, 18 de junio de 2013

La Imprenta en el Ecuador , Primer Periódico Ecuatoriano.


La Imprenta  en  el Ecuador
La primera imprenta del Ecuador data de la época colonial y llevaba el nombre de Compañía de Jesús, que  fue traída por el sacerdote jesuita José María Maugeri en el año 1755. El establecimiento de la imprenta en Ambato, como era de esperarse, dio un impulso inusitado al periodismo y otras actividades relacionadas con las artes gráficas.
La primera imprenta fue operada por el tipógrafo alemán don Johannes Schwartz.
Cuatro años más tarde la imprenta fue llevada a Quito por el padre Maugeri e instalada en el Seminario de San Luís Rey.  Esta fue la única imprenta que existió en Quito durante más de veinticinco años, fue en ella que el Dr. Eugenio Espejo imprimió las primeras publicaciones de "Primicias de la Cultura de Quito".
El monumento a la Primera Imprenta en la ciudad de Ambato lleva una inscripción que dice: “Aquí funcionó la primera imprenta del Ecuador”.
En el año de 1835 se editó el primer periódico en Ambato, edición gubernamental en la que se detallaban las actas de la Convención Nacional y desde ese año la ciudad ha sido un gran centro de difusión del pensamiento escrito por medio de periódicos, revistas y libros.

Primer Periódico del Ecuador





Fue la primera publicación que apareció en la antigua Presidencia de Quito, y fue editada bajo los auspicios de la Escuela de la Concordia.
Su primera edición circuló el 5 de enero de 1792, y a través de sus páginas se hicieron importantes reflexiones morales y disquisiciones filosóficas, así como recomendaciones y consejos sobre salubridad, higiene, buenas costumbres, etc.Apareció quincenalmente bajo el espíritu impulsador del Dr. Eugenio Espejo. Las suscripciones se admitieron al precio de real y medio de plata por cada pliego completo, pero los quiteños no respondieron a su publicación y, por el contrario, lo acogieron con frialdad, propiciando inclusive una absurda persecución que se extendió también en contra su autor.No fue ni revolucionario ni subversivo y solo buscaba el mejoramiento de Quito en lo intelectual y la reactivación de su espíritu adormilado y como resignado a lo peor.En “Primicias” Espejo emplea un lenguaje rebuscado y elitista que aún hoy no es fácil de interpretar o leer; peor aún debió serlo en esa época y para un pueblo al que el mismo Espejo había reconocido ignorante en su “Discurso” de 1789, cuando dice: “Estamos destituidos de educación. Sería adulación, vil lisonja, llamar a los quiteños ilustrados, sabios, ricos y felices, No lo sois: hablemos con el idioma de la escritura santa; vivimos en la más grosera ignorancia y la miseria más deplorable” (Eugenio de Santa Cruz y Espejo / Primicias de la Cultura de Quito, p. 136).“Primicias de la Cultura de Quito” fue una “revo­lucionaria novedad en el monótono y encogido vivir de la con­ventual ciudad. Espejo, el acusado de libelista y panfletario, al que "lo habían mandado sacando a Santa Fe" -como debían decir con uno de sus tan pintorescos gerundios las gen­tes quiteñas-, ahora convertido en secretario de la "Sociedad Patriótica", publicaba un papel periódico. Aquello a muchos no satisfizo, y usando el quiteñísimo recurso del rumor maledicente se dieron a socavar el naciente edificio” (Idem, p. 144-145).    Fue por eso que tuvo una trayectoria efímera que solo alcanzó su séptima     publicación, que apareció el  jueves 29 de marzo de 1792.

1 comentario:

  1. Ya que esta página se refiere a la historia del diseño, cabe anotar que el diseño del monumento a la primera imprenta fue llevado a cabo por el Arquitecto Gonzalo Darquea Sevilla experto urbanista y encargado de la planeación estratégica de más de 200 municipios en Latinoamérica.

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